Federación de Baloncesto de Madrid

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EN JUEGO - FBM - Preferente

El Madrid supera la prueba de Torrelodones



Con un gran trabajo colectivo en defensa, talento en ataque, y también resistiendo en la segunda mitad la ofensiva de su rival, el Real Madrid júnior se impuso al Baloncesto Torrelodones, el único equipo que le ha ganado esta temporada (78-71 en la primera fase). Los blancos llegaron al descanso con 15 puntos de ventaja y llegaron a tener más de 20, pero la reacción torresana, impulsada por Jorge Sánchez-Ramos (19 puntos) puso un punto de incertidumbre.

Baloncesto Torrelodones A 56 (9+10+22+15):
Santiago Paz (4), Jorge Sanchez-Ramos (19), Víctor Chuka Anuebu (7), Musa Jahna (8), Eddy-Valentino Pinedo (8) -cinco inicial- Hugo Pérez, Pavel Danailovski (6), Luca Schaffino (2) y Mateo Laguna (2). No jugaron: Maksym Shulga y El Hadji Ngom.

Real Madrid 76 (19+15+19+23)
: Tristan Vukcevic (10), Stefan Vukcevic (10), Konstantin Kostadinov (10), Juan Núñez (1), Ab Sediq Garuba (2) -cinco inicial- Eli John Ndiaye (8), Nikolás Cebrián, Javier Ramos-Yzquierdo, Urban Klavzar (16), Dan Duscak (7), Owen Aquino (5) y Henry Veesaar (7).

Árbitros: Ontescos y Vital.

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El cuarto enfrentamiento júnior de la temporada entre Torrelodones y Real Madrid (con dos triunfos blancos y uno torresano) comenzó los locales mirando decididamente al aro. Sus cuatro primeros tiros no entraron y, en el primero del Madrid, Juan Núñez sacó la falta para abrir el marcador. Stefan Vukcevic confirmó al mayor acierto de su equipo con un rebote ofensivo y el 0-3... Sin embargo, el partido era una lucha sin cuartel entre dos equipazos. Un triple de Víctor Chuka fijó el 5-5 a los dos minutos y medio de juego, y el aro pasado de Santiago Paz adelantó al Baloncesto Torrelodones.

Los locales llegaban con bajas importantes (El Hadji Ngom, Maksym Shulga...) pero también con la fuerza y movilidad de su más reciente incorporación, el gambiano Musa Jahna. El Madrid sin Matteo Spagnolo, pero con la magia de Núñez... Pero pronto se vio que no era un partido de nombres, sino de juego colectivo. El primer cuarto se mantuvo igualado hasta que el Madrid empezó a apretar en defensa. Cuando la ventaja visitante se alargó a 7-12, comenzaron los relevos entre los locales, pero los blancos, muy firmes atrás, prolongaron el parcial hasta 0-14 (7-19) y el primer cuarto terminó con una brecha de diez puntos: 9-19.

Ese dominio visitante continuó en el segundo periodo (11-24 a 7:24) pese a los intentos del técnico local, Juan Norat, en busca de soluciones. Sin embargo, el Madrid seguía casi infraqueable en defensa, con un robo tras otro. Y delante, aparecía el talento. El artillero Urban Klazar hizo el 11-26 antes de que Jahna recortara desde los tiros libres. Con 13-28 a 4:40 para el descanso, Norat paró el crono. Esta vez sí, los locales frenaron ligeramente el vendaval, aunque el 19-34 del descanso reflejó la superioridad del Madrid en la primera mitad.



Los locales tenían que reaccionar cuanto antes y, de hecho, Norat pidió otro tiempo muerto a los 25 segundos de empezar la segunda mitad. Ya no había margen para la duda. Sin embargo, el triple de Jorge Sánchez-Ramos se salió de dentro y la penetración de Chuka tocó en el aro... Lo que sí se mantuvo fue la mejoría atrás. Al Madrid le costaba más anotar. Desde la defensa y con el triple de Pavel Danailovski, el Baloncesto Torrelodones inició una intento de escalada, pero estaba muy lejos (24-44 a 6:22) y el Madrid era un rival muy duro. Y, por si había alguna duda, apareció Konstatin Kostadinov con un mate estratosférico...



Sin embargo, apoyados en la defensa, los locales subieron los escalones uno a uno. El triple de Sánchez-Ramos (35-48) acercó la ilusión de la remontada, también  el 38-48 de Eddy-Valentino Pinedo y (tras un 0-5) otro triple de Sanchez-Ramos con el que se cerró el tercer periodo: 41-53. El último comenzó con un intercambio de golpes. Si los locales recortaban, los visitantes volvían a irse. La distancia se mantuvo casi intacta (49-62 a 6:30) hasta que Danailovski rompió la barrera de los diez (54-63) con cinco minutos por delante... Quedaba tiempo para todo, pero la seguridad de Eli John Ndiaye bajo el aro y otro triple del especialista Klavzar (máximo anotador de su equipo con 16 puntos) volvieron a lanzar al Madrid, ya de forma definitiva.
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